La niña de Rajoy

La niña de Rajoy es del PSOE, tiene gafas, y quiere ser alcaldesa sea como sea. La niña de Rajoy necesita a sus amigos. Necesita que la protejan de esa turba insensible, que se interpone en su camino. La niña de Rajoy olvida fácilmente de unas elecciones a otras. La niña de Rajoy, no para de cosechar resultados desastrosos y ya se está quedando sin gente a la que culpar. Claro que a la niña de Rajoy no le importa, su camino esta escrito...

La niña de Rajoy extiende alfombras rojas a aquellos a los que ha masacrado verbalmente durante la época turbulenta que le toco vivir; tal vez no la recuerda, pero el resto del municipio sí.

La niña de Rajoy sabe con la cara que se levanta, pero nunca con la que se va a acostar. La niña de Rajoy cambia de compañero de baile las veces que haga falta, todo para no ser expulsada de la competición política... es obvio que los ineptos compañeros de turno son los únicos responsables de sus fracasos electorales ¿por qué debería ella asumir ciertas coherencias que aquellos con un poco de dignidad política asumen?

La niña de Rajoy ya ha buscado a los amigos de papá para asegurarse esa paz espiritualmente política que tanto anhela, lástima que la gente este despertando... Tal vez no sepa que el ser humano nace con unas cualidades innatas que en algunos están más desarrolladas que en otros. -Podrías llegar a... portavoz del PSOE en Almuñecar, pero no tendrías eso que solo los elegidos tienen. Perdóname por ser tan sincero- .

La niña de Rajoy juega a ser política y perjudica seriamente los intereses de su municipio (me han contado dos historias increíbles que tal vez debería contar, pero no creo que mi madre se sintiese orgullosa, ¿donde quedaría el “savoir faire” que me ha inculcado desde mi más tierna infancia?)

En el fondo, ¿quiénes somos nosotros para interferir en el sueño de la niña de Rajoy? Porque no olvidemos que los socialistas auténticos no imponen, no manipulan, no mienten, no se pasan los estatutos por el forro, y no acuden en busca de ese padre que una vez fue el innombrable, cuando las cosas se tuercen .

La lucha promete ser larga y encarnizada, no se harán prisioneros, y todos mostraran sus verdaderas caras, cuando solo unos pocos queden en pie.

El tercer desterrado.