Reflexiones de Patricio Sánchez: mi paso a "concejal no adscrito"

Debo una explicación a todos los vecinos y vecinas del municipio y en especial a aquellos que votando nuestra opción contribuyeron a que saliera elegido concejal, a los que agradezco desde estas líneas su confianza y explico el porqué de mi paso a concejal no adscrito.

Como independiente me presenté en las listas del grupo socialista con la mayor ilusión, pues libre de ataduras, recién jubilado, deseaba entregarme con total disponibilidad y sin intereses personales ni materiales al servicio de nuestro municipio. También lo hice con gran satisfacción dada la buena acogida que percibí por la asamblea local del PSOE de Albuñol, así como por algunos directivos de la ejecutiva de Granada.

Finalizadas las elecciones se entra en el periodo de pactos, obvio, al no haber obtenido ningún grupo la mayoría absoluta para gobernar, pues de trece concejales que les corresponden a nuestro ayuntamiento, el grupo más votado consiguió solo cuatro.

Mi perplejidad fue mayúscula cuando en la celebración del Pleno de Constitución me entero de un pacto padre-hija con la bendición de la ejecutiva de Granada, sin la menor información y comunicación a la asamblea local, componentes de la lista, ni a mí como concejal electo. Bajo mi criterio el objetivo del pacto era de perpetuarse padre e hija en la alcaldía como si de una herencia se tratara.

Más intriga: antes del Pleno se nos entrega el legajo (escritos y documentos en los que se basará el pleno) en el que no se me adscribía a ninguna concejalía, de ahí mi afirmación pacto padre-hija; pero sorpresa, en la celebración del Pleno, por decreto, se me asignan las concejalías de Educación y Sanidad, evidentemente esto fue repensado por otros y el Alcalde para poder decir que era un pacto entre el CPM y el PSOE. Obviamente no acepté dicha imposición aunque anhelaba trabajar en esas materias.

Ante lo ocurrido me pregunto: ¿Dónde está la democracia interna?, ¿dónde la transparencia?, ¿cuál es el grado de lealtad a los demás?, ¿cuál es su verdad?, ¿a qué juegan?, ¿dónde están sus valores?.

Quiero que también se conozca que una de las personas promotoras del pacto me dijo textualmente: ‘Voy a ganar la guerra, no la batalla.’. ¿Cuál era esa guerra? Estaba claro, despojar al alcalde y hacer desaparecer el CPM. ¿Cómo lo hicieron? Aplicando la forma ‘si no puedes con tu enemigo, hazte amigo’. Se me animó para que formara parte de ese entramado. No me conocían, se equivocaban, abomino del juego sucio y métodos rastreros para conseguir esos objetivos. Las guerras se ganan en las urnas y me pregunto ¿por qué no participaron en las listas ellos y ellas y nos las endosaron a otros?

Nunca he creído en la puesta en práctica del pacto y además ya lo dijo el cabeza del CPM en el pleno: ‘Ni me voy ni me echará nadie’.

Al representante de la ejecutiva en Granada, Sr. García, ante la petición de que si yo no aceptaba lo pactado, él en mi lugar dimitiría, le digo que no me voy, le estorbaba más que una china en un zapata-; por el contrario, podía haber dado la cara a tiempo, no sería por falta de medios. Cuando lo hizo, tarde, trascurridos meses, por las presiones de algunos escritos, vino a decirnos o esa era la conclusión que saqué, que eso es lo que había con respecto al pacto y a todo se tenía que decir amén. ¡Democracia participativa!

Permítanme esta reflexión: a María José la veo estos días esponjada como un pavo real, no cabe en ella misma, está plena; es normal, se acerca el momento culminante, va a conseguir alcaldesa de nombre, no de hecho.

Así la percibo, no me saluda, ¡respeto al maestro!, esas prácticas no han sido de mi aula; como no puede ser de otra manera la educación y buenos portes hay que mamarlos, son actuaciones idénticas a las de su progenitor, auténtica fotocopia, es natural, son los mismos genes.

No María José, con el engaño y el enredo no se consiguen los puestos, ¿has olvidado lo que has hecho con el grupo socialista?, ¿cuál es tu catadura moral en este asunto? Reflexiona, cuando cogiste las riendas, el PSOE de Albuñol tenía ocho concejales, en la anterior legislatura lo dejaste en tres, en la actualidad dos y con mi ida te has quedado sola. No quiero ser agorero, ni creer en malos augurios, pero de seguir esta trayectoria ¿cuál será el final? Está claro que has perfeccionado la operación de restar, pero también la de dividir. Has conseguido con gran parte de tu familia y tres de fuera que los militantes y afiliados que te pusieron y te apoyaron, se marchen. ¡Vuestra estrategia y la del PSOE de Granada!

No fuiste capaz de confeccionar una lista para las elecciones municipales, tuvimos que comprometernos otros y además salir a buscar otras personas en los últimos momentos para poder completar la lista, dado que se agotaba el plazo de entrega. ¡¿Capacidad de liderazgo?!, ¿dónde estaban tus familiares y apoyos?

Ante la falta de lealtad, comunicación, transparencia y huida sistemática, la mayoría de los afiliados han luchado por poner orden y en el lugar que le corresponde al partido en Albuñol, procurando hacer las cosas bien y dentro de la legalidad, pero Granada, gran parte de la familia, otros tres y tú habéis tenido más fuerza, abortando mis intentos reivindicativos y legales, por lo que en bloque se han dado de baja en el partido y yo, fiel a la verdad y a ellos, y por lo expuesto anteriormente me doy de baja como concejal de ese partido.

Ojala, algún día, dejen de existir clanes familiares y nuestro municipio sea gobernado por personas salidas de las urnas, asépticas, integras, sin ambages, con ilusión, realistas, equitativas, leales, veraces, valientes, reivindicativas…, que no sean esclavos de sus palabras por insultos ramplones, faltones, maleducados y simples.

Fdo. Patricio Sánchez Sánchez.